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martes, 20 de diciembre de 2016

El joven que mató a golpes a una mujer transexual deberá pagar 200.000 euros al viudo

La sentencia confirma la pena de diez años de cárcel al agresor tras el acuerdo entre el fiscal y las defensas


El joven que mató a golpes a una transexual en la Albufereta en julio de 2015 deberá indemnizar con 200.000 euros al viudo de la fallecida, según establece la sentencia de la Audiencia Provincial hecha pública ayer. El fallo confirma la pena de diez años de cárcel al agresor que pactaron el fiscal y las defensas durante el juicio, acuerdo que fue avalado por un jurado popular. El segundo de los acusados, al que inicialmente se le imputaba también el crimen, ha sido condenado por un delito de encubrimiento y la pena que se le ha impuesto es de un año y tres meses, el tiempo que lleva en prisión por estos hechos, por lo que quedó en libertad tras finalizar la vista. Aunque se trató de una conformidad, el fallo no es firme y contra él cabe recurso ante el Tribunal Superior de Justicia.


El fallo declara probado que el acusado Ilan Laouni Mahir conoció a la víctima cuando regresaba a su casa en la Albufereta el 21 de julio de 2015, donde estaba pasando unos días de vacaciones, Una vez en el domicilio, mantuvieron relaciones y al finalizar mantuvieron una discusión. La víctima, de nacionalidad brasileña, sufrió los golpes mortales cuando aún se encontraba desnuda. Los puñetazos en la cara, además de romperle dos dientes, causaron a la posteriormente fallecida una conmoción cerebral que la dejaron semiinconsciente. También sufrió puñetazos y patadas en el abdomen que le causaron una fuerte hemorragia interna y que fue la que determinó el fallecimiento.

En cuanto a Doud Djeraffi, la sentencia declara probado que no participó en la agresión, aunque ayudó a su amigo a deshacerse del cuerpo y a fregar la sangre para intentar eliminar pruebas.

La magistrada Francisca Bru, que ha presidido el tribunal del jurado, señala en el fallo que el veredicto incide en que en el proceso se han practicado pruebas de cargo válidas para condenar a los dos acusados.

Según la sentencia, el principal acusado es autor de un delito de homicidio, lo que se apoya en la propia confesión de éste, la declaración de los policías que investigaron los hechos. La muerte de la víctima y la forma en que se produjo «concuerda con la agresividad demostrada por éste en su expediente penitenciario», dice el fallo.

La juez establece también una indemnización de 200.000 euros para el viudo de la fallecida en concepto de daño moral y perjuicios sufridos por el fallecimiento de la víctima.

Los dos acusados fueron encontrados en el apartamento pocas horas después de que apareciera el cadáver en el ascensor. Los policías que intervinieron en el caso estuvieron llamando a la puerta durante toda la mañana, ante la sospecha de que el crimen podría haberse cometido en el interior del piso. Al no recibir respuesta, pidieron una orden judicial de registro. Al entrar en el piso se encontraron a los sospechosos en la cama, según declararon los agentes «haciéndose los dormidos». Ambos fueron detenidos en ese momento.