Buddy: el ave especialista

Por lo general, no publico cosas personales aquí, pero mi querido amigo Buddy falleció recientemente el 6 de marzo de 2018. Si disfrutaste de todo lo que escribí en los últimos trece años o más, es probable que Buddy estuviera posado en mi hombro. durante parte o todo el tiempo que lo escribí. Este post conmemora su vida y nuestro tiempo juntos ...

La última vez que escribí una publicación como esta fue en agosto de 2005, cuando mi Jenday conure Coby falleció inesperadamente. Puedes leer todo sobre su historia a través de ese enlace. Nunca antes había estado tan cerca de un compañero animal. Su paso me devastó.

Mi compañero en ese momento sugirió que honramos a Coby (que era un pájaro de rescate con un pasado difícil) al adoptar otro pájaro con una historia similar. En ese sentido, mencionó un loro que estaba en adopción en la tienda de aves en la que estaba trabajando. El pájaro se llamaba Buddy.

Buddy posado en una computadora portátil
alrededor del año 2007

Según lo que nos dijeron, Buddy fue encontrado al lado de una carretera por una familia. Ella es una conure de Nanday, que están relacionados con Jendays y no son autóctonos de América del Norte. La familia debe haberse dado cuenta de esto, porque la rescataron. La historia previa de Buddy sigue siendo un completo misterio; todo lo que sabemos es que ya tenía entre 10 y 15 años (según la estimación de nuestro veterinario) cuando llegó a nuestras vidas, y que era una recolectora de plumas (aunque para algunos razón, ella nunca escogió su torso superior, dejándola con un distintivo "crop top" de plumas). Presumiblemente, ella escapó o fue liberada por su gente previa. Dada la naturaleza de Buddy (amaba la compañía y no era especialmente aventurera), esta última parece mucho más probable. Lamentablemente, no es raro que las personas liberen a los loros en la naturaleza si se cansan de ellos; generalmente esto es una sentencia de muerte para el pájaro,

Pero, afortunadamente, esta familia se llevó a Buddy. Al parecer, uno de los niños la llamó Buddy y la cuidaron durante unos meses antes de dejarla en la tienda de pájaros para que alguien la adoptara.

una de las primeras fotos
de Buddy y yo juntas

El 28 de agosto de 2005, fuimos a la tienda para poder conocer a Buddy. Nunca olvidaré ese día. Ella dio un paso hacia mi dedo. La puse sobre mi hombro, y caminé alrededor de la tienda, todo el tiempo sollozando. Seguí diciéndome a mí mismo que Coby nunca podría ser reemplazado (lo cual era cierto). Pero Buddy era muy dulce, y adoptar otro pájaro con una historia similar a la de Coby tenía mucho sentido. Así que terminamos llevándola a casa con nosotros.

Buddy pasó sus primeros días con nosotros en la parte trasera de nuestro apartamento antes de presentarla a nuestros otros pájaros (que vivían en el frente). Estaba en las primeras etapas de escribir Whipping Girlen ese momento, me levantaba muy temprano todos los días para escribir antes de ir a mi trabajo diario. Recuerdo abrir la jaula de Buddy e invitarla a unirse a mí. Muchos loros están (comprensiblemente) vacilantes o asustados al ser trasladados repentinamente a un nuevo hogar. Pero Buddy fue tan fácil y amigable desde el principio. Y fue entonces cuando comenzó nuestra larga amistad juntos, durante esas sesiones de escritura temprano en la mañana.

Buddy jugueteando con mis (
nuevos ) lentes, 2008

Buddy era la entidad más dulce que he conocido en todos mis años. He tenido muchos compañeros de animales increíbles y personas en mi vida, por lo que no lo hago a la ligera. Todo lo que ella quería era estar sobre mi hombro (o el de otra persona), arreglarse la piel (especialmente mis pecas), y tal vez hurgarse los dientes (mi pareja actual se refirió en broma a ella como "pájaro dentista"). Mientras estaba contenta colgando de mi hombro durante el día mientras trabajaba en la computadora, se emocionaba por la noche cuando me dirigía al sofá para relajarme, porque sabía que la atención adicional, los escrituras y las caricias estaban en la tienda. . Si teníamos invitados, Buddy por lo general sería el primero de mis pájaros en intentar hacer amigos con ellos. A medida que sus visitas a nuestro veterinario se hicieron más frecuentes en sus últimos años, todos los que trabajaban allí la amaban por lo extrovertida y amable que era. Fue simplemente un placer estar en su presencia.

Mi tiempo con Coby fue relativamente breve: solo un poco más de un año, aunque pareció mucho más. Pero Buddy fue un elemento fijo en mi vida durante más de trece años y medio, hasta que falleció el mes pasado. No podría resumir toda su vida aquí. Pero lo que sigue es una colección de recuerdos aleatorios y momentos pertinentes que son importantes para mí, y que deseo hacer una crónica aquí.

Muttonchop (izquierda) y Buddy, principios de 2006

Buddy tendía a favorecer a los compañeros humanos con los compañeros de pájaro. Pero la única excepción fue nuestro cockatiel Muttonchop. Los dos solían pasar todo el tiempo en la jaula de Buddy, lo llamamos la "habitación del dormitorio" por la forma en que casualmente "se relajan" juntos. (Lamentablemente, Muttonchop fallecería un año después). En la foto, Buddy está agarrando su "pelota Buddy", le gustaba especialmente la blanca, y solía susurrar mientras la sostenía, como si le contara secretos.

Nanday tiene voces muy crocantes, por lo que Buddy realmente no hablaba tanto las palabras humanas, aparte del ocasional "aumento", "gracias" e imitando la risa humana (especialmente mientras estábamos viendo los viejos episodios de Jon Stewart Daily Show , donde a menudo se reía justo a tiempo, como si entendiera la broma).

Macbeth (izquierda), yo y Buddy, 2009

A pesar de su falta de perspicacia vocal, Buddy era súper inteligente. Su hermana Macbeth (otra ave de rescate) a menudo grita sin razón aparente, y cuando lo hace, a menudo hago el sonido "Ssssshhhh", que Buddy comenzó a imitar (aunque cuando lo hizo, sonó más como la radio estática). A veces ponía todas las aves en sus jaulas y me retiraba al dormitorio; eventualmente olvidarían que estaba en el apartamento. Y escucharía a Macbeth comenzar su rutina de gritos habituales, y a veces Buddy intervendría (sin ninguna sugerencia mía) haciendo que su sonido "Ssssshhhh" estético, como para decirle a Macbeth que se calle. ¡Fue hilarante! Hasta que un día, en una rara ocasión, cuando Buddy estaba molesto y comenzó a hacer el sonido estándar de alarma "¡CAW CAW CAW!", Le dije a Buddy que se callara, y ella respondió con su radio-estática "Ssssshhhh,

Como dije, Buddy muy rara vez gritaba porque estaba molesta. Si ella estaba molesta por lo que estaba haciendo, a veces hacía un sonido particular de croar para avisarme (y si insistía, ella me mordía ligeramente la oreja). Pero, por lo general, cuando gritaba, era porque estaba feliz. A veces, cuando estaba especialmente extasiada, emitía un sonido característico de "¡Whoop!", "¡Whoop!", A menudo salpicado con un jubiloso "¡Rip-Wee-Guk!" Al final. A menudo, ella hizo una indescriptible danza del cuello mientras le hacía "¡Whoop!" suena, como se muestra en el video a continuación.

Con el tiempo, sus hermanas Tengu y Tallulah (que, como caiques, son increíbles imitadores vocales) recogieron el "¡Whoop!" De Buddy. ¡Alarido! ¡Rip-Wee-Guk! "Y comenzaron a usarlo para expresar alegría y emoción ellos mismos.

Buddy & Tengu (en la cabeza) poco
después de mi cirugía de cáncer de piel

Mencioné antes que Buddy a menudo me arreglaba las pecas en los hombros y la cara. Bueno, durante el verano de 2006, ella se obsesionó con lo que pensé que era solo un grano en mi mejilla. Supuse que se iría, pero Buddy siguió insistiendo. Resultó que fue cáncer de piel que me llamó la atención (una historia que he contado en otro lugar ). A veces le decía a Buddy que me había salvado la vida, aunque no era literalmente cierto (ya que el tumor no era maligno). Pero ella probablemente me salvó de perder incluso más de mi cara que yo.

En julio de 2012, el pie izquierdo de Buddy, que para ella (como la mayoría de los loros) era su pie dominante que usaba para comer, de repente dejó de funcionar. Recuerdo que un día llegué a casa del trabajo y la encontré tropezando en el fondo de su jaula, aparentemente incapaz de volver a subir. Sin embargo, ella hizo todos sus sonidos felices habituales para saludarme. Mientras estaba en pánico esa noche, ella pasó la noche tratando de encontrar formas alternativas de moverse y comer sus pellets. Cuando la llevé al veterinario, al principio no pudieron explicarlo; pensaron que tal vez había tenido un derrame cerebral. Pero a lo largo de los años, a medida que su uso de esa pierna se deterioró aún más, uno de los médicos mencionó la posibilidad de que pudiera deberse a un problema renal, ya que los nervios ciáticos de los loros (que controlan la pierna) pasan por el riñón. Hicieron radiografías y ultrasonidos, pero no pudo encontrar ninguna evidencia de daño renal. (Aunque, como pronto quedará claro, esta fue probablemente la causa).

Buddy y yo trabajando desde casa
en 2016

Más tarde, en 2012, al ser despedido de mi trabajo diario, me convertí en escritor y orador a tiempo completo. Esto significaba trabajar desde casa (con ocasionales viajes fuera de la ciudad para hablar / realizar), así que Buddy y yo pasamos más tiempo juntos, hasta dieciséis horas o más en algunos días. Mientras que ella siempre disfrutaba posándose conmigo, se volvió un poco más dependiente de mí debido a su incapacidad para moverse tan bien como solía hacerlo, y también porque sus hermanas (es decir, mis otras aves) comenzaron a molestarla más porque sintió su vulnerabilidad (no solo por su pierna, sino que también se estaba levantando allí en años). Dado que Buddy y yo estábamos prácticamente conectados en el hombro, ella me daba todas estas pequeñas señales para avisarme cuándo quería renunciar a algo de comida y agua, cuándo necesitaba defecar, cuándo quería hacer escrúpulos, y cosas así. Y podía decir cuándo era feliz, o frustrada, o triste, y demás, y ella a menudo me ofrecía atención o afecto extra en consecuencia. Nos volvimos más íntimamente conectados de allí en adelante.

el día de la cirugía de Buddy:
un arcoíris doble en UC Riverside

A principios de 2016, Buddy desarrolló otro problema de salud, esta vez con su cloaca. El médico pensó que podría deberse a un cáncer y quería hacer una biopsia, lo que implicaría someterla. Las aves son muy sensibles a la anestesia y, a veces, nunca despiertan de la cirugía, así que estaba asustado. Estaba a punto de ir de gira con la Hermana Spit, así que programamos el procedimiento para que se llevara a cabo mientras yo estaba fuera, y mientras Buddy estaba siendo abordado en el veterinario. El día de su cirugía, nosotros (Sister Spit) estábamos en UC Riverside, y estaba lloviendo afuera mientras esperaba su llamada. Al recibirlo, me sentí aliviada al saber que Buddy sobrevivió al procedimiento y que estaba bien. Inmediatamente después de esa llamada, salí y vi este doble arcoiris, que fue un augurio positivo. Resultó que no era cáncer después de todo,

estos no son los medicamentos
que está buscando ...

A partir de entonces, Buddy tomó una serie de medicamentos, lo cual odiaba, especialmente porque tendría que secarla primero. Pero finalmente se acostumbró, se convirtió en parte de nuestra rutina diaria, y siempre estuvo contenta de obtener una nuez (su comida favorita) cuando terminó la terrible experiencia. Teniendo en cuenta sus medicamentos y el aumento de las condiciones de salud, cada vez que salía de la ciudad por más de un día, la dejaba en el veterinario para el abordaje más observación. No tengo coche, así que durante este período de agitación, varios amigos me prestaron el suyo, Buddy, ¡y no podía agradecerles lo suficiente por su generosidad!

Tuve dos viajes fuera de la ciudad durante el verano de 2017. Durante el primero de junio, el veterinario descubrió que Buddy tenía un soplo cardíaco. Era un desarrollo nuevo, por lo que querían hacer radiografías y posiblemente otras pruebas el mes siguiente mientras ella estuviese abordando allí durante mi segundo viaje. Fue entonces (el 5 de agosto, específicamente) que recibí la noticia de que encontraron una gran masa en su abdomen que no estaba allí durante sus radiografías previas en 2015. Dada su ubicación, y el hecho de que sus niveles de ácido úrico eran más alto de lo normal, temían que fuera su riñón.

en el veterinario, esperando ansiosamente
los resultados de la prueba de Buddy ...

Querían hacer una cirugía exploratoria para ver lo que realmente estaba pasando dentro de ella; programamos eso para el 14 de agosto. La foto de la derecha es de mí y de Buddy en el veterinario el viernes anterior (el día 11), mientras esperábamos los resultados de sus niveles de ácido úrico. Si fueran demasiado altos, tendría que pasar el fin de semana allí, recibiendo líquidos antes de la cirugía. Afortunadamente, sus niveles eran lo suficientemente bajos como para poder pasar el fin de semana en casa. Esa semana, le di todos sus alimentos favoritos, hicimos todas sus cosas favoritas, y tomé muchas fotos y videos de nosotros mientras estuvimos juntos (incluida la foto de abajo de Buddy comiendo maíz en la mazorca, y los numerosos videos en el final de esta publicación). Me preocupaba que pudieran ser nuestros últimos días juntos.

El lunes siguiente, estaba (una vez más) agradecido de saber que Buddy sobrevivió a la cirugía. El veterinario me informó que la masa en realidad era tejido de riñón; no era maligna, pero era inoperable, ya que eliminarla la mataría. Pero lograron drenar gran cantidad de líquido de los quistes en la masa del riñón, lo que redujo considerablemente su tamaño. Pero desafortunadamente, eso fue todo lo que pudieron hacer.

A Buddy le encantaba comer
maíz de la mazorca

El plan de juego hacia adelante era hacer controles regulares sobre sus niveles de ácido úrico y vigilar el tamaño de la masa mediante ultrasonido. Lo hicimos durante los meses posteriores, y cada vez los resultados fueron prometedores. Sabíamos que la misa probablemente le quitaría la vida, pero por el momento estaba relativamente sana y feliz. Hice mi mejor esfuerzo para no tomar ningún momento que compartimos por sentado durante el interino.

A principios de marzo, tuve mi primer evento de habla fuera de la ciudad de 2018. Estaba cerca de Columbus, Ohio, así que tuve la oportunidad de quedarme con mi compañero anterior (con quien originalmente adopté Buddy) y su familia actual, incluyendo Tengu y Tallulah, los dos caiques que aún hacen el "¡Whoop!" De Buddy. ¡Alarido! ¡Rip-Wee-Guk! "Ruidos felices de vez en cuando.

De todos modos, dejé a Buddy en el veterinario el 5 de marzo, como lo había hecho muchas veces en los últimos dos años. Durante el viaje, Buddy estaba despreocupado, acicalándose en su portabebé mientras conducía; ir al veterinario ya era algo desagradable para ella en este momento. Mi veterinario planeó realizar las pruebas habituales mientras ella se quedaba con ellos. Esa noche, recibí una llamada de ellos: los niveles de ácido úrico de Buddy eran más altos de lo que deberían ser. No es alarmantemente alto, pero es suficiente para que planeen darle sus fluidos al día siguiente. Estaba preocupado, por supuesto, pero me dijeron que, por lo demás, estaba bien, así que traté de olvidarlo.

Tengu y Tallulah, con quienes Buddy
dice "¡Whoop! ¡Alarido! ¡Rip-Wee-Guk! "Los
sonidos felices viven en ...

Al día siguiente, volé a Columbus. Esa noche, estaba cenando con mi compañero anterior y su familia, y justo cuando me preguntaron cómo estaba Buddy, sonó mi teléfono. Fue el veterinario. Respondí, esperando la llamada habitual de "Buddy está haciendo bien, solo quería darle una actualización". Pero no era la actualización habitual: me llamaban para informarme que Buddy falleció inesperadamente. Estaba bien la mañana anterior cuando la dejé, y estuvo bien todo el día en el veterinario, cuando de repente se derrumbó. Intentaron resucitarla, pero ella no respondió.

Sentí como si toda la sangre se hubiera drenado inmediatamente de mi cuerpo al escuchar las noticias. Yo estaba en completo shock. Entendí la información que acababa de tomar, pero todo se sentía como un sueño. La idea de estar sin Buddy era sencillamente insondable, a pesar de que me había estado preparando para esta eventualidad en los últimos años. Compartí la triste noticia. No podía llorar al principio, pero finalmente las lágrimas vinieron. Pasamos la noche contándole historias a Buddy, a veces riéndonos, a veces llorando. Normalmente, cuando voy a viajes fuera de la ciudad, paso la noche solo en la habitación de un hotel; no podía imaginar recibir noticias tan devastadoras bajo esas circunstancias. Así que fue tranquilizador y catártico (sin mencionar una coincidencia increíble) que pasé esa triste noche con amigos cercanos que habían vivido con Buddy y la conocían tan bien como a cualquiera.

Buddy tomando una siesta en mi pierna, marzo de 2017

Más tarde me enteré de que la causa de la muerte era aparentemente una embolia cardíaca, por lo que Buddy pasó rápidamente y sin mucho dolor. La autopsia también reveló que su masa renal había crecido significativamente más grande desde su cirugía anterior seis meses antes. Dadas las circunstancias, probablemente fue lo mejor que pasó como lo hizo, sin tener que soportar demasiado dolor, y sin que yo tuviera que tomar la desgarradora decisión de finalmente decepcionarla. Sin embargo, todavía duele que nunca pude despedirme de ella.

Pero nos amamos el uno al otro. Y le di la mejor vida que pude. Estoy bastante seguro de que ella ya entendió eso.

Cuando volví de mi viaje a Ohio, quería sentarme y escribir esta retrospectiva, al igual que escribí mi homenaje a Cobyjusto después de su muerte. Pero no pude. El dolor fue demasiado intenso. Pasé gran parte del último mes tratando de superar todos los días, además de ocuparme de compromisos previos y otros compromisos de hablar fuera de la ciudad. Toda mi vida se ha estructurado en torno a Buddy, y recién ahora estoy empezando a acostumbrarme a vivir sin ella.

No lo sabía en ese momento, pero
esta sería la última foto que
tomé de Buddy, febrero de 2018

Estoy mejorando un poco este mes, pero todavía me duele pensar en Buddy: pensar en todas las cosas pequeñas que extraño de ella y que nunca volveré a experimentar.

Solía cantarle una canción a Buddy en la ducha y cuando nos acurrucamos. Era una linda canción improvisada que parecía disfrutar. Las letras han tomado nuevos significados para mí desde su muerte:

estoy enamorado de Buddy bird
Ella es un ángel, ¿no has oído
Y amo a Buddy todo el camino?
Porque ella es tan fey
Y ella me hace gay

Aquí estoy yo cantando esa canción a Buddy en agosto de 2017, uno de los numerosos videos que tomé de ella justo antes de su cirugía:

Aquí hay otra canción que solía cantarle: "Me encanta el Buddy, el pequeño Buddy especial, un bbbbbb-Buddy ...". Me atraganté al final esta vez ...

Como dije, grabé un montón de videos de Buddy, a menudo haciendo cosas mundanas, justo antes de su cirugía de agosto. Aquí ella está tomando un baño:

Buddy siempre odió cuando hice esto ...

¡Pero le encantaba perseguir el cursor en mi computadora!

todas las mañanas, Buddy (y las otras aves) obtendrían algunas semillas de girasol como regalo matutino ...

Mientras trabajaba, Buddy tomaba pequeños refrigerios. Ella disfrutó sumergir las bolitas de su ave en el agua (para suavizarlas) antes de comerlas ...