¡Ley Integral de Transexualidad para Andalucía ya!

Cuestionarios insultantes, que violan la intimidad de la sexualidad de las personas transexuales, absoluta dependencia del criterio único y arbitario de una única persona que se dice especialista en identidad de género...

Agrado hace tiempo que ya no va a la UTIG (Unidad de Trastorno de Identidad de Género) porque no quiere volver a pasar por lo mismo: tratar de convencer a alguien de que no sufre ningún tipo de trastorno. Creada para ayudar, acompañar, a las personas transexuales a encontrar su salud, entendida ésta en su máxima expresión, en la mayor armonía posible entre lo que se siente y lo que se es, estas unidades han pervertido el objetivo con que fueron creadas para pasar a consolidar la transfobia dentro de las instituciones, en este caso el Gobierno andaluz.

Si has tenido alguna vez esa sensación de que quienes dicen

pretender tu bien lo único que hacen es hacerte sentir peor, como una persona más enferma, más discriminada, más apartada de lo que el resto considera la norma, entonces tú también has sido, de alguna manera, Agrado. Una simple analítica de sangre supone trasladarse a miles de kilómetros y entrar por la puerta, por debajo de un cartelito que dice que allí van personas trastornadas. Ya eso sería suficiente para decretar, por mandato popular, el cierre y derribo de estas unidades, pero hay más, mucho más: cuestionarios insultantes, que violan la intimidad de la sexualidad de las personas transexuales, absoluta dependencia del criterio único y arbitario de una única persona que se dice especialista en identidad de género, etc.

“Desinstitucionalizar la transfobia”, erradicarla de una vez y para siempre de este y de otros estamentos de la administración pública andaluz donde se ha solidificado, donde ha cobrado fuerza de la mano de intereses partidistas y de estrategias cortoplacistas encaminadas simplemente a conservar y aumentar un poder que se ejerce despóticamente, pues busca el beneficio de las personas transexuales sin tener en cuenta su voz.

Cuando la sociedad, no sin dificultades y no sin ámbitos donde todavía la transfobia campa a sus anchas, parece estar realizando verdaderos avances en el derecho a la igualdad de las personas transexuales, resulta frustrante que desde las instituciones, como cosas de palacio que siempre van despacio, se resistan a remover procedimientos, requisitos, condiciones que emanan de un imaginario colectivo donde la transfobia, como un síntoma más del heteropatriarcado reinante, es la materia prima con la que se redactan articulados, decretos, órdenes de consejerías, y al servicio de la cual se pone a personas pagadas con dinero público, también de las personas transexuales.

¡Ley Integral de Transexualidad para Andalucía ya!

http://www.kaosenlared.net/component/k2/item/73199-%C2%A1ley-integral-de-transexualidad-para-andaluc%C3%ADa-ya-4/7-desinstitucionalizar-la-transfobia.html