Carlos. Antonio. Jaime. Cristina. Son seropositivos con nombre propio. No todos se conocían, pero ayer se reunieron frente a la Puerta de Alcalá convocados para recordar a los fallecidos a consecuencia de una enfermedad mortal: el sida. "Yo soy seropositivo", reconocía ayer Juan Pedro, de rostro firme y ojos claros, mientras sostenía en su mano derecha una vela encendida. "Trabajo con jóvenes [es educa-dor] y veo que un alto porcentaje no ve los peligros de la enfermedad. Ya no se ven las imágenes de los años ochenta. Muchos llevamos una vida normal. Y se creen que el sida está superado. Pero para eso falta muchísimo", reconoce.
Junto a él, Ester habla de los métodos de prevención. De la normalización de la píldora del día después, de la falta de conciencia entre los jóvenes sobre las diferencias entre "anticonceptivo" y "barrera contra enfermedades de transmisión sexual". Juan Pedro y Ester se miran y miran sus velas. Se acercan y las depositan entre los arcos de la obra de Sabatini.
Allí pendía anoche un lazo rojo compuesto por rostros. Hombres, mujeres, homosexuales, bisexuales, heterosexuales, transexuales. "Hay que poner cara al sida para acabar con la estigmatización", aseguraba ayer Juan Antino, uno de sus diseñadores. En este sentido insistía Toni Poveda, de la Federación Estatal de Lesbianas, Gays y Transexuales. "El mejor método para combatir el sida, además de la imprescindible inversión económica, es aunar la prevención y la visibilidad", aseguraba. "El VIH se debería tratar como cuestión de Estado, hace falta más implicación de la administración, de la empresa, la universidad, los políticos y los sindicatos".
El acto, organizado desde hace 12 años por el Colectivo de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales de Madrid (COGAM), tuvo lugar anoche con motivo del Día Internacional contra el Sida, que se celebra hoy.
El coro del COGAM entonó el conocido Blowin' in the wind de Bob Dylan y se leyó un manifiesto que hablaba de la estigmatización social del seropositivo y de los peligros de la necesidad de mejorar la prevención. En él, se pedía más inversión en prevención a la Consejería de Sanidad. Definieron como "insultante" la inversión del Gobierno regional en planes de prevención, ya que, según el COGAM, la Comunidad de Madrid está a la cola en el presupuesto destinado a otras partidas, a pesar de que en ella reside el 25% de la población seropositiva nacional. Una inversión, aseguran, que Asturias multiplica por 15 y Cataluña por cinco. También reseñaron la importancia del fin de la exclusión, la explotación y la pobreza para combatir la enfermedad. "Las realidades más injustas son las que tiran del sida", resumieron.
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