Sin mencionar a ningún grupo humano, el nuevo presidente de Estados Unidos hizo referencia a la igualdad y la libertad, algo que defienden muchas minorías, pero por sobre todo —y en tiempos actuales— los colectivos de gays, lesbianas, bisexuales y transexuales.
"Ha llegado el momento de reafirmar nuestro espíritu de firmeza: de elegir nuestra mejor historia; de llevar hacia adelante ese valioso don, esa noble idea que ha pasado de generación en generación: la promesa divina de que todos somos iguales, todos somos libres y todos merecemos la oportunidad de alcanzar la felicidad plena".
Sin centrarse en ningún grupo humano, etnia, creencia, condición social u orientación sexual, Barack Obama recordó y reafirmó que la igualdad y la libertad son la base de una sociedad más justa.
Bien se dice que cada uno es "dueño de sus silencios y esclavo de sus palabras". De seguro éstas pronunciadas hoy por el nuevo inquilino de la Casa Blanca serán un buen recordatorio de las minorías sexuales si no les da señales de igualdad, libertad y felicidad a sus reclamos.
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