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miércoles, 17 de julio de 2013

Población transexual estaría siendo víctima de trata de personas

Según la investigación hecha por la Corporación Caribe Afirmativo, una parte de esta población que se dedica al oficio de la prostitución, es manipulada por una red de personas que los explotan y amenazan con el fin de que trabajen dándoles más de la mitad de lo que cobran.
 
Entre 50 mil y 200 mil pesos está el valor de lo que un transexual o un hombre que tiene sexo con otro hombre (HSH) cobra a cada cliente. De ese valor, y según las denuncias, solo les estarían pagando de 20 mil pesos.
Cabe aclarar que se han denominado “HSH” porque son jóvenes que no se han considerado abiertamente como gays.
“Hace un año y medio teníamos 31 casos, 20 de ellos eran de mujeres trans que trabajaban en lugares como el Centro Histórico, Bocagrande y en cercanías al puerto. Estas personas fueron abordadas por otras que controlan el servicio sexual en la ciudad. Cabe decir que no solo fueron contactadas en estos lugares sino también a través de avisos colocados en los periódicos”, dijo Wilson Castañeda, representante de Caribe Afirmativo quien dará a conocer esta investigación en la Universidad de los Andes Bogotá en el marco del III Congreso Latinoamericano de Trata de Personas, donde estará la alta Comisionada de Derechos Humanos de las Naciones Unidas.
La investigación
En esta investigación, y luego de la conversación que eluniversal.com.co tuvo con Castañeda, lo primero que hay que decir es que cada año, las personas trans y hombres que tienen sexo con hombres (HSH), ha venido aumentando y no precisamente por individuos cartageneros. El ingreso de trans de Barranquilla, Bogotá y Medellín es constante.
“Si bien las prácticas sexuales entre hombres y ofertada por mujeres trans en lugares estratégicos para el turismo, como el puerto de Cartagena y Santa Marta, han entrado en auge en los últimos diez años, no son reconocidas en materia de acciones preventivas de violencia y garantía de sus derechos, sí son evidenciadas tanto por los turistas, como por todos los que articulan esta red, y entre los que están desde los empresarios de estos procesos de “trafico humano”; autoridades portuarias, hasta, las personas trans y HSH, provenientes en su mayoría de los barrios periféricos, una situación que cada día está en aumento”, indica la investigación.
Dentro de las tácticas de presión en las que esta red tiene sucumbida a los trans y HSH, está la de quitarle sus documentos de identidad, tomarles el dinero y amenazarlos a no denunciar ni hablar de ellos en ninguna parte.
Caribe afirmativo ha dicho que no busca la revictimización, tampoco piensa que el problema sea el ofrecer sexo, lo que se pide es que se implementen medidas para prevenir que este delito afecte a personas de la población LGBT en las ciudades turísticas de América Latina y el Caribe.
Hacen también un llamado al sector turístico a controlar este problema. “La
red de parahotelería que se configura en torno a los servicios que ellos prestan y el incremento de foráneos trans y HSS que llegan por temporadas al Caribe con el propósito de ofrendar servicios sexuales ha configurado unas rutas de trata de personas”.
Carácteristica de esta red
Según lo encontrado por Caribe Afirmativo, los integrantes de estas redes “A pesar de ofrecer sexo a otros hombres- no está conformada por personas que manifiesten un interés erótico hacia los hombres, sino que su cosmovisión los lleva a considerar que el “ejercicio penetrativo” hacia otro hombre en “actitud activa”, lejos de ser una práctica homosexual, es ejercicio de fuerza y virilidad, a cambio de un beneficio económico”.
Quienes son
Cuatro individuos se han atrevido a denunciar ante la Fiscalía a esta red. Lo poco que se ha podido establecer es que los integrantes de esta misma serían personas del interior del país, quienes manejarían todo el servicio sexual en la ciudad.
 

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