VIDEOS

CONOCENOS

DOCUMENTOS

PRENSA

domingo, 17 de enero de 2010

Transexuales


Parece que nos gusta la polémica. Opinar de todo. Casi siempre sin saber de casi nada. Movidos por credos o informaciones parciales e interesadas. ¿Interesadas? ¿Se puede convertir un asunto tan trágico como el que una persona se sienta hombre y tenga cuerpo de mujer, o viceversa, en una cuestión política? No, por favor, no seamos canallas. Lo primero y fundamental es respetar la experiencia y el conocimiento de los afectados y los expertos. Son los psiquiatras, los cirujanos, los endocrinólogos y, sobre todo, los transexuales los que pueden decir y reclamar. Y si el transexual es menor de edad e inmaduro o si los médicos tienen dudas, contar con la opinión de los padres, o esperar. Los demás, políticos, periodistas, legisladores…, tendremos que tener humildad. Sólo los que sufren la tragedia, y la transexualidad incomprendida lo es, saben lo que necesitan para poder vivir como seres humanos íntegros. He conocido muy bien dos casos. Uno era el de una mujer que fue al ginecólogo, con el que yo trabajaba como enfermera, porque no le venía la regla. Se la estudió y se vio que genéticamente era varón y que tenía los genitales dentro del cuerpo. Fue allá por el año 1980 y, sin embargo, el especialista no dudó de que esa persona sentía como mujer y que eso era. La operó y le hizo una vagina. Era lo que ella quería. Tengo otra amiga mujer, ella así lo siente y los demás no tenemos ninguna duda; sigue sin poder tratarse. Sus condiciones económicas y personales son precarias y los tratamientos costosos. Pero aunque tiene cuerpo de varón, nadie diría que lo es. Ella es ella. Porque el cuerpo no tiene nada que hacer contra el cerebro y el alma. Por eso tenemos que dejarnos de pamplinas y ayudar a los que padecen este sufrimiento. A luchar por sus derechos y a quererlos como son. Y con lo que requieren.

Paloma PEDRERO.-

No hay comentarios: