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jueves, 3 de diciembre de 2009

Juez ignora en España caso de homofobia

Una denuncia por injurias homófobas a dos empleados homosexuales, que fueron calificados de «enfermos» en un correo electrónico que se intercambiaron dos directivos de Gartner K.G., en Barcelona y en el que también se instaba a despedirlos, ha sido archivada por el juzgado de instrucción número 33 de dicha ciudad.
La querella calificada por algunos como histórica ponía en tela de juicio de la homofobia es delito o no. La juez instructora acordó sobreseer la querella presentada por los dos trabajadores contra dos directivos y la misma empresa austríaca, por considerar que con el término «enfermos» se aludiera a la orientación sexual de sus empleados.
La juez, ha descartado que los ejecutivos incurrieran en delito de injurias porque, según ella, la palabra «enfermos», no alude a la condición sexual de los demandantes sino «exclusivamente a la actividad profesional del querellante y del otro trabajador», además ha señalado que el contexto de la posible injuria «no es otro que un escenario interno, estrictamente laboral, sin publicidad alguna para terceros ajenos a la empresa». La juez considera que el uso del término «homosexual» para referirse en este caso a los trabajadores «difícilmente hoy en día» puede tener una intencionalidad injuriosa.

La FELGTB critica a la juez del caso Gartner KG por ignorar la homofobia


La Federación Estatal Española de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales, FELGTB, ha mostrado su indignación. Para Ximo Cádiz, responsable de diversidad sexual y ámbito laboral de la FELGTB “es evidente que la juez no ha hecho un mínimo ejercicio de empatía ni conoce lo que supone para un gay, una lesbiana, una persona bisexual o transexual el hecho de ser calificado como enfermo. Queremos aprovechar para recordarle que durante décadas las personas LGTB hemos luchado para que las instituciones médicas dejasen de definir la diversidad sexual, precisamente, como una patología, como una enfermedad. Suponemos que, aplicando el criterio de su sentencia, en el contexto de su trabajo, tampoco será una injuria que digamos que ella u otras personas son “enfermas” (de homofobia)”.
Asimismo, señala Cádiz “cuando se explicita que se procederá a despedir a los dos trabajadores “cueste lo que cueste” se está mostrando, claramente, la intención de la empresa”.
Antonio Poveda, presidente de la FELGTB ha hecho un llamado a la judicatura para que sea más sensible y rigurosa en el estudio de las denuncias de homofobia. Para Poveda “sentencias como ésta contribuyen a reprimir aún más los escasas denuncias que siempre comportan costes personales y laborales para los trabajadores y trabajadoras. Es una mala señal que se pueda llamar “enfermos” a sus empleados homosexuales sin que eso implique una reprobación legal”. La FELGTB anima a los denunciantes a estudiar vías posibles de recurso.
Otros casos de homofobia.
Recientemente se han denunciado en Alicante y Alcoy, España otros casos de violencia homofóbica, perpetrados por grupos que han amenazado de muerte a un escritor alicantino y a un joven quien fuera golpeado, según información provista por la victima, en un bar en Alcoy.

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