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domingo, 6 de septiembre de 2009

La herejía de COLEGAS



Fuente Dos Manzanas.-


La pasada temporada el colectivo COLEGAS acaparaba todos los titulares al desmarcarse ruidosamente de la línea oficial imperante entre los colectivos homosexuales mayoritarios: ataques al Orgullo del Sur de Sevilla, notas de prensa subidas de tono contra COGAM y la FELGTB, declaraciones rotundas como “menos pluma y más proyectos sociales”, politizadas manifestaciones ante alguna embajada, y sobre todo por el indisimulado acercamiento político al Partido Popular, acercamiento en el que se incluyen acuerdos financieros, cursos de verano y otros flirteos varios. Revisando mi hemeroteca me he dado cuenta de que tengo un montón de noticias relacionadas con COLEGAS. Después de releerlas todas con detenimiento, me llegan a la cabeza una serie de pensamientos:
1. Podría ser una buena noticia que COLEGAS y el principal partido conservador acerquen posturas, pero no lo es, porque el partido del Sr. Rajoy no está legitimado para defender los derechos de los homosexuales.
2. Hay, como mínimo, tres argumentos para sostener que el PP es un partido homófobo. Uno. Su recurso de inconstitucionalidad contra el matrimonio homosexual. Dos. La feroz oposición de los conservadores a EpC, una asignatura que quiera hablar de homosexualidad en las aulas. Tres. La abundante actitud homófoba del PP, manifestada en sus aliados naturales, en las cuantiosas declaraciones homófobas de muchos de sus miembros y en esas manifestaciones callejeras “a favor de la familia”…. Estos tres argumentos están ampliamente desarrollados en un artículo que publiqué aquí la temporada pasada, titulado “Ser homosexual y votar al PP”. Desgraciadamente el texto sigue vigente.
3. Si el PP es un partido a todas luces homófobo, ¿Cómo se explica la alianza entre COLEGAS y un partido manchado de homofobia? Por parte del PP me queda claro: el partido de Rajoy le está haciendo un guiño electoral al colectivo gay, poderoso enemigo y aliado inquebrantable de la izquierda. Pero por parte de Colegas no se acaban de ver las razones; yo sólo puedo aventurar algunas: intereses políticos encubiertos, promesas de prebendas y de subvenciones en caso de una victoria popular, necesidad de medrar de alguno de sus dirigentes con el ánimo de posicionarse como la referencia gay en la derecha conservadora de nuestro país… ¿de qué otro modo podría entenderse si no esta unión contra natura? La alianza entre COLEGAS y el PP suena más a oportunismo político que a defensa de los intereses de los homosexuales, y por lo tanto es sospechosa.
4. ¿Qué podría hacer el PP para que lo consideráramos un interlocutor válido? ¿Qué tendría que cambiar para que los homosexuales sintiéramos que realmente le importamos? Muy sencillo. Primero, retirar ese emponzoñado recurso de inconstitucionalidad. Dos, dejar que se hable de homosexualidad en las aulas. Tres. Desautorizar categóricamente a sus notables homófobos, ¿Qué hace el señor Dimas Cuevas de senador? Si el PP realmente quiere ganarse el favor de los homosexuales, ¿por qué no da estos pasos tan sencillos en vez de juguetear con uno de nuestros colectivos? ¿Por qué no tiene la elegancia y el coraje político de rectificar? Voy a aventurar dos motivos. Primero, porque en su cálculo político considera que este viraje al centro no es rentable electoralmente. Y segundo, porque el Sr. Rajoy es un político pusilánime, rehén de sus propios aliados, y no tiene el suficiente coraje político para tomar decisiones de esta envergadura. Por este motivo yo siempre he pensado que nunca llegará a ser presidente del gobierno.
5. Si el PP quiere ganarse el favor de los homosexuales – bienvenida sea esta iniciativa-, no puede jugar a ser equidistante, tiene que dar pasos concretos, firmes y sinceros. Si no lo hace la mayoría tendremos la sensación de que nos está vendiendo humo.
6. ¿Y COLEGAS?, ¿qué podría hacer el equipo directivo de COLEGAS para que no sospechásemos de sus intenciones al aliarse con el PP? Yo creo que algo falla estrepitosamente en la (abundante) política de comunicación del colectivo. Todos nos hemos enterado muy bien de su fobia al Orgullo Gay; de su fobia a Pedro Zerolo y al PSOE en general; de sus insultos a Beatriz Gimeno, a la que han llegado a llamar “seguidora de Goebbels”; de su manía al “estereotipo” homosexual (sin pararse a pensar que muchos homosexuales están cómodamente dentro de este “estereotipo”); de su famoso “menos pluma y más proyectos sociales”, (sin reparar en lo ofensiva y dañina que es una afirmación así para los que tenemos pluma y somos amanerados porque nos apetece); y de otras muchas discrepancias más o menos subidas de tono. Y ahora repito la pregunta inicial ¿qué podría hacer COLEGAS para que no sospechásemos de sus intenciones? Pues empezar por usar esta misma vehemencia contra los despropósitos del propio Partido Popular, como por ejemplo su recurso de inconstitucionalidad contra el matrimonio homosexual.
7. Y por descontado nadie está cuestionando aquí la labor de campo de los voluntarios y voluntarias de COLEGAS; de lo único que se está hablando es de la dudosa estrategia política orquestada desde la cúpula.
8. En un mundo ideal, en un mundo normalizado y sin homofobia, habría gays de derechas y gays de izquierdas, y nadie nos rasgaríamos las vestiduras. Pero en este mundo en el que vivimos: qué absurda, qué estéril y qué incomprensible es esta división entre nuestros colectivos.
rafael.rodriguez.dm@gmail.com

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